Qué es evaluar un aprendizaje?

¿Qué es evaluar un aprendizaje?
Escribo sobre algunas cuestiones que me están haciendo pensar, la “educación a distancia” que se da en la actualidad, con los “cursos en línea”. Esta condición ha posibilitado en mi caso, dar la oportunidad de que el estudiante, prepare su trabajo a su propio ritmo.
Pienso que esta situación inédita, ha hecho surgir cuestionamientos; y ha puesto a la luz paradojas, porque la distancia nos ha llevado a cuestionar ¿qué es lo que debe aprender mi alumno? Pues además, los jóvenes, no todos tienen las óptimas condiciones, y a muchos si les angustia el encierro.
En mi caso me he llevado sorpresas, muchos de mis alumnos, están pensando con profundidad. Entienden el tema, pues lo saben manejar, y lo más sorprendente, es que en muchos, está surgiendo la creatividad. Pero como parte de ésta es la originalidad, surge el problema de la evaluación ¿cómo evaluar frente a estilos y modos de estudio tan distintos? Y me pregunto ¿por qué tendrían los estudiantes, que estar compitiendo por las mejores calificaciones?
Considero que en buena medida, el problema de la evaluación, se da, porque la escuela le da prioridad a lo conceptual, y solo se evalúa con una alta calificación, si el estudiante, muestra una gran habilidad lógica-matemática.
Sin embargo, si nos cuestionamos ¿qué puede hacerse para vivir en un mejor mundo? Considero que la creatividad, tiene un papel muy importante, hay que construir cosas que no existen para cambiar el mundo, para alcanzar una vida de bien. Pero el bien, se logra desde una actitud ética, que comprende buenos sentimientos, que comprende, fuerza de espíritu, dignidad, integridad, valentía, honestidad, estos valores no dependen de una buena argumentación; no niego la racionalidad, lo que me preocupa es que no se atienda a un pensamiento complejo y a darle más fuerza a las humanidades.
Lo humano requiere de símbolos y de calidades, en este plano, es necesario refinar la sensibilidad, con arte, con belleza en los sentimientos, con actitudes éticas, haciendo más amplio el campo de percepción hacia la espiritualidad.
Por eso considero que cuando los alumnos entregan un trabajo, por ejemplo, empelando las artes, ahí, no cabe decir, este alumno que es muy fluido y presenta claros argumentos es el mejor; pues posiblemente es una persona más íntegra aquella que es más creativa, aunque posiblemente esta creatividad requiera de tanta energía, empeño, voluntad e inspiración, que no le da tanta fuerza a la argumentación. Por eso considero que ambos alumnos merecen la máxima calificación.
En ocasiones la sencillez implica mayor comprensión que la argumentación extensa y conceptual; son necesarios muchos tipos de talentos para que en unión, pueda cambiarse el mundo, a uno de más calidad, y en este sentido, debemos darle cabida a la diversidad de inteligencias e incluir la inteligencia creativa, la inteligencia que existe en las emociones, la inteligencia de la sencillez y la inteligencia del alma.